En esta ocasión les voy a recomendar la revista de moda por Internet de mi amigo Héctor. Para que se den un quemón, les platico rápido sobre él: Héctor Ortega es Licenciado en Diseño y Publicidad en Moda egresado de la Escuela de Moda Jeanette Klein, con una especialidad en Coolhunting cursada en Madrid, España.
Así que si esa info no fue suficiente, visita la página de su revista electrónica donde encontrarás información sobre lo último de la moda, las mejores fotos y lo último de las colecciones.
Visítala y recomiéndala.
Saludos...
Leonardo.
lunes, 27 de septiembre de 2010
sábado, 25 de septiembre de 2010
La semana del papel
Es un hecho que los tiempos están cambiando, sin duda alguna. Las cosas no son como lo eran cuando eramos niños: desde la forma de comer, de peinarse, de pensar. En fin, para mucha gente de mi edad que hemos vivido todos estos cambios es interesante a veces hacer una retrospectiva para ver qué ha pasado y qué hemos hecho.
Con el paso del tiempo he notado la forma en que se llena la ciudad con tantos y variados volantes: ya sea para anunciar el concierto de Bengala, la promoción de 2 x1 de una óptica de Motolinia o la renta de un departamento en Avenida Aztecas. Total, la cantidad de volantes que se reparten a diario es simplemente desorbitante; por una parte, genera fuentes de empleo para la gente que de verdad está todo el día rascándose el ombligo, pero por otro lado genera muchisima basura que trae como consecuencia contaminación y coladeras tapadas que en estas épocas de lluvia sólo traen problemas ¬¬
Eso sin contar que de 10 personas a la que le ofrecen un volante, 7 lo rechazan y los otros 3 seguramente lo van a tirar dos pasos adelante. He ahí que se me ocurrió esta idea: me decidí a comenzar a recolectar todos los volantes que me ofrecieran en una semana para primero pesarlo y luego llevarlo a vender a algún lado.
Igual y muchos piensan que es una pérdida de tiempo pero al menos me servirá para darme una idea del papel que se puede salvar ya sea reciclándolo o reusándolo. Así que te invito a que hagas la prueba: por una semana acepta los volantes que te den en la calle (nada más no vayas por ahí pidiendo a diestra y siniestra, tiene que ser en tus rutas cotidianas) y si te es posible, pésalo. Puede que te lleves una gran sorpresa.
Saludos...
Leonardo.
P.D.: A punto de cumplir 23 añotes, qué miedo...
Con el paso del tiempo he notado la forma en que se llena la ciudad con tantos y variados volantes: ya sea para anunciar el concierto de Bengala, la promoción de 2 x1 de una óptica de Motolinia o la renta de un departamento en Avenida Aztecas. Total, la cantidad de volantes que se reparten a diario es simplemente desorbitante; por una parte, genera fuentes de empleo para la gente que de verdad está todo el día rascándose el ombligo, pero por otro lado genera muchisima basura que trae como consecuencia contaminación y coladeras tapadas que en estas épocas de lluvia sólo traen problemas ¬¬
Eso sin contar que de 10 personas a la que le ofrecen un volante, 7 lo rechazan y los otros 3 seguramente lo van a tirar dos pasos adelante. He ahí que se me ocurrió esta idea: me decidí a comenzar a recolectar todos los volantes que me ofrecieran en una semana para primero pesarlo y luego llevarlo a vender a algún lado.
Igual y muchos piensan que es una pérdida de tiempo pero al menos me servirá para darme una idea del papel que se puede salvar ya sea reciclándolo o reusándolo. Así que te invito a que hagas la prueba: por una semana acepta los volantes que te den en la calle (nada más no vayas por ahí pidiendo a diestra y siniestra, tiene que ser en tus rutas cotidianas) y si te es posible, pésalo. Puede que te lleves una gran sorpresa.
Saludos...
Leonardo.
P.D.: A punto de cumplir 23 añotes, qué miedo...
martes, 7 de septiembre de 2010
Mañanero
Después de tanto tiempo nunca pensé que algún buen pensamiento saliera de mí antes de las 7 a.m. Me habia ya acostumbrado a que a esa hora o me preparaba para ir al trabajo (cuando trabajaba) o seguía dormido plácidamente en mi camita, cuando el año pasado iba en la tarde a la escuela. Pero desde enero de este año regresé al turno matutino, causando que no carburara bien en la primera clase...típico de un universitario flojo como yo XD.
Anyway, el día de hoy me levanté a la hora de costumbre (5 a.m.) y guiado más por la inercia y el sueño, me encontraba camino a CU y a las 7:15 llegué a clase, pensando en qué hacer para evitar que se me cerraran los párpados cuando de repente...oh sorpresa! me vinieron un par de buenas reflexiones; unas cuantas motivadas por los comentarios de clase y otras cuantas por cosas que ya había pensado desde días antes.
Unas pueden resultar algo triviales pero otras me parecieron interesantes, además entiéndanme, eran las 7 de la mañana. Ahí van pues:
1.- Seguramente te suenan familiares frases como 'ah, es un chiste local entre _____ y yo' o 'sólo _____ y yo sabemos' en alguna conversación con un grupo de amigos. He empezado a pensar que esto es una manifestación inconsciente que quiere decir 'mira, mi amistad con _____ es mucho mejor que la mía contigo' y en lo particular comienzo a odiar a la gente que dice eso con frecuencia, al final, qué ganan con eso...tal vez reconocimiento del mismo grupo de amigos o pura inflada de ego.
2.-Me choca que los maestros se molesten poque no tenemos el mismo nivel de cultura que ellos. Pienso que no les ha caído el veinte de que a pesar de que perseguimos intereses similares (ingenierilmente hablando) no crecimos en la misma época, y que seguramente a ellos sus profes se las aplicaban igual. Digo esto porque dos de mis tres profesores son de ese tipo de maestros que dicen :"¿qué no conocen tal o cual cosa? ¡pues qué no han vivido jóvenes!'. Me recuerda a mi madre hcae algunos años, no sé por qué.
3.-Una frase de Federico Fellini estuvo dando vueltas en mi cabeza en toda la segunda clase. Dice que cuando encontremos algo hermoso en nuestra vida nos aferremos a él hasta que sea hora de dejarlo ir. Le comentaba a Abad (que fue quien me dijo la frase) que qué se podía hacer para que todo a lo que nos aferremos sea hermoso, y como no ser engañado con falsos hermosos, así como el aprender a dejar ir. La frase sigue aún en mi cabeza...
Por último, pregúntate : ¿quién eres? ¿te gustas como eres? y tendrás mucho que meditar el día de mañana.
Saludos...
Leonardo.
Anyway, el día de hoy me levanté a la hora de costumbre (5 a.m.) y guiado más por la inercia y el sueño, me encontraba camino a CU y a las 7:15 llegué a clase, pensando en qué hacer para evitar que se me cerraran los párpados cuando de repente...oh sorpresa! me vinieron un par de buenas reflexiones; unas cuantas motivadas por los comentarios de clase y otras cuantas por cosas que ya había pensado desde días antes.
Unas pueden resultar algo triviales pero otras me parecieron interesantes, además entiéndanme, eran las 7 de la mañana. Ahí van pues:
1.- Seguramente te suenan familiares frases como 'ah, es un chiste local entre _____ y yo' o 'sólo _____ y yo sabemos' en alguna conversación con un grupo de amigos. He empezado a pensar que esto es una manifestación inconsciente que quiere decir 'mira, mi amistad con _____ es mucho mejor que la mía contigo' y en lo particular comienzo a odiar a la gente que dice eso con frecuencia, al final, qué ganan con eso...tal vez reconocimiento del mismo grupo de amigos o pura inflada de ego.
2.-Me choca que los maestros se molesten poque no tenemos el mismo nivel de cultura que ellos. Pienso que no les ha caído el veinte de que a pesar de que perseguimos intereses similares (ingenierilmente hablando) no crecimos en la misma época, y que seguramente a ellos sus profes se las aplicaban igual. Digo esto porque dos de mis tres profesores son de ese tipo de maestros que dicen :"¿qué no conocen tal o cual cosa? ¡pues qué no han vivido jóvenes!'. Me recuerda a mi madre hcae algunos años, no sé por qué.
3.-Una frase de Federico Fellini estuvo dando vueltas en mi cabeza en toda la segunda clase. Dice que cuando encontremos algo hermoso en nuestra vida nos aferremos a él hasta que sea hora de dejarlo ir. Le comentaba a Abad (que fue quien me dijo la frase) que qué se podía hacer para que todo a lo que nos aferremos sea hermoso, y como no ser engañado con falsos hermosos, así como el aprender a dejar ir. La frase sigue aún en mi cabeza...
Por último, pregúntate : ¿quién eres? ¿te gustas como eres? y tendrás mucho que meditar el día de mañana.
Saludos...
Leonardo.
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